¿Bailaste el Lago de los Cisnes en el Lago de los Cisnes?

Os dejo aquí la mejor campaña publicitaria de los últimos tiempos. Cojonuda. ¡Sólo de oir la música ya me entran ganas de comprarme un coche! Ja,ja,ja... ¡Llevo días pegando saltos!

"¿Inventaste una palabra?"




Y si no, siempre puedes conseguir una licencia o hacer feliz al gordo!!!!

PD: La canción es de Kiss y se llama "I was made for loving you"

La destrucción o el adiós

No, lo de la destrucción no va por la burbuja inmobiliaria, no. Es una canción del nuevo disquito de La Habitación Roja. Muy bueno por cierto y muy recomendable, Chingón!. Pues eso, que me recuerda el estado en el que se encuentra un amigo mío. Se la dedico. ¡A ver si le da fuerzas para tomar decisiones de una vez!. La podeis escuchar aquí. Yo, que soy de letras, aquí os la dejo:

La destrucción o el adiós

Miro el mundo por nuestra ventana,
y yo ya no puedo esperar más.
Sé que nunca vas a perdonarme,
pero hay cosas que uno debe hacer.

Sé que tus amigos no comprenden,
que yo ya no quiera verte más,
que me marche sin decirte nada,
ya no volveré a mirar atras.

Voy a escaparme de madrugada,
me voy con lo puesto, nada más.
No sé qué me depara el destino,
sólo que me tengo que marchar.

Volveré a creer en lo increible,
buscar las estelas en la mar,
ser como el Guardián Entre el Centeno
y sentir el vértigo al volar.

Puede que algun día me arrepienta,
pero sólo vivo para hoy.
El camino es lo único importante,
me da igual dónde me pueda llevar.
El camino es lo único importante,
me da igual dónde me pueda llevar.

Miro el mundo por esta ventana
y yo ya no puedo esperar más.
No se si voy a poder olvidarte,
sólo que me tenía que marchar.
Volveré a creer en lo increible,
buscar las estelas en la mar.
El camino es lo único importante
me da igual dónde me pueda llevar

El barullo de la vivienda

Leo hoy en la versión gallega de El Pais, un muy interesante artículo de Xerardo Estévez, titulado “El Barullo de la Vivienda” sobre el problema de la idem. Las negritas son mías:

"En la entrevista televisiva a cien bandas a la que se sometió el presidente Zapatero me sorprendió, no la anécdota del café, sino la ponderada respuesta ante la insistente demanda de un chaval de 19 años que quería a toda costa comprar un piso. Prudente, Zapatero contestó con una alusión al esfuerzo del Gobierno por habilitar apartamentos de alquiler. Para mi gusto, debía haber sido más terminante. Una sociedad donde la máxima aspiración de una persona de esa edad es ser propietario de un piso no es razonable. Se confunde el derecho constitucional a disfrutar de una vivienda digna y adecuada con el de su posesión en propiedad.

[...]

En este barullo general da la sensación de que lo único importante es el tema de la vivienda y parecen olvidarse aspectos sustanciales vinculados al planeamiento, como la calidad de los espacios públicos, la localización de los equipamientos y dotaciones, la
resolución de los conflictos de movilidad, etcétera. Este tipo de reivindicaciones ha desaparecido del mapa. Para satisfacer una demanda que parece insaciable se siguen diseñando planes generales con cantidades inmensas de suelo apto para urbanizar, muy por encima de las expectativas demográficas, y así sólo se consigue calentar el suelo de todos los municipios y fomentar la especulación.

Sin embargo, al parecer el mercado empieza a desacelerarse. En las grandes áreas de Madrid y Barcelona aparecen ya síntomas de contención e incluso disminución de precios. Si es así, cabe preguntarse qué va a pasar con los propietarios hipotecados a la hora de cotizar la mensualidad por unos pisos que pudieran depreciarse, probablemente tasados en exceso y con un Euribor más alto que el pactado en un principio.

A pesar de que la política económica está basada en gran medida en el auge inmobiliario, me parece bueno que el mercado se enfríe para introducir racionalidad, que se estudie la fórmula para aterrizar con suavidad y, algo primordial en mi opinión, que se vuelva a insertar vivienda y planeamiento, un planeamiento hecho con rigor y limpieza administrativa al lado de una política de alquiler pensada y diseñada con los ayuntamientos, para unos jóvenes y no tan jóvenes que no pueden, ni deben, empeñarse de por vida en la compra de una vivienda."

Aquí podéis leer el artículo completo.


Por otro lado, me he recreado un ratito leyendo este hilo del foro de Burbuja.info. Da verdadero miedo ver la inconsciencia de la gente. Me temo que no tardaremos mucho en tiempo en ver a la gente embargada y en la calle. En la calle no, que en España se vuelve a casita de los padres. Y si estás casado, cada uno a casa de los suyos. Ja, ja, ja…. No creo que pasen muchos años antes de que veamos manifestaciones pidiendo al Gobierno que “arreglen” el problema. Como los de los sellos, vamos. Otra cuadrilla de ases de las finanzas. Pero de mis impuestos que no esperen ver ni un duro, para arreglar sus “superinversiones”. Si te compras una cosa que no puedes pagar y la tienes que devolver finalmente, pues TE JODES. Ni más ni menos.

Leed el hilo si teneis un rato que es un verdadero descojono.

Mierda, Mierda, Mierda...

...y más mierda. Mierda puta. Resulta que esta Semana Santa, ni esquí, ni surf, ni nada de nada... Anginas, eso sí. Hay que ser campeón para pasarse 4 días de vacaciones con anginas. Por lo menos hubo un poquillo de Play, de Prison Break y de Lost. Y un paseo por la playa también, ¡que coño!

A llorar: La burbuja revienta

Hasta ahora, el común de los españoles (incluidos los que tenían 2 dedos de frente) se habían dedicado a negar la realidad. Actitud muy común en este país por otra parte. En este país falla la educación y la mentalidad. Tenemos mentalidad de "pepitos" de pobres hombres venidos a más, de gañanes... Y esto es así y no hay nada más que decir...

Un síntoma claro: El otro día en el programa "Tengo una pregunta para usted..." un chaval de 19 años le preguntaba a Zapatero a ver cuándo se iba a poder comprar una casa. Pregunta muy válida por otra parte, pero muy sintomática también. En un país avanzado (este no lo es), centroeuropeo, desarrollado, alguién de 19 años preguntaría por las becas, la educación, la investigación en las universidades, el transporte público, la política exterior e interior... Aquí no, aquí un chaval que acaba de salir del colegio piensa ya en hipotecarse a 50 años, quedarse fijo en un sitio sin más perspectiva de desarrollo personal, de viajar, de conocer gente, etc. Quieren encontrar un curro fijo, aunque sea una puta mierda y esté mal pagado y dedicarse a pagar sus 4 ladrillos el resto de su vida, viviendo siempre en el mismo sitio, haciendo el mismo trabajo y viviendo con la misma persona. Todo esto es un problema de mentalidad que se puede entender en las personas mayores que vivieron una posguerra y una dictadura, pero, ¿en los jovenes también?! ¡También!


Económicamente, el problema se basa en dos grandes mentiras:

1. Los posos nunca bajan y nunca han bajado
2. Alquilar es tirar el dinero.


Sobre el primer punto diré que simplemente es falso. Cualquier activo que esté sobrevalorado baja. En el momento en el que oferta y demanda no casan a un precio de equilibrio, el mercado se ajusta. Eso pasa con el pan, con las acciones de Endesa y por supuesto con los pisos. Aquí y en cualquier parte del mundo. Porque esa es otra. Sí, en Japón (y en Alemania, USA, UK, y por supuesto ESPAÑA(ZA) los precios de los pisos ya han bajado en otras ocasiones. Pero aquí no va a pasar. Nadie se acuerda de que ya ha pasado ¿Por qué? Nadie lo sabe... O nadie lo quiere saber. La respuesta son las 2 primeras frases de este párrafo. Construimos casi más casas que el resto de los 300 millones de europeos y las ponemos a la venta a un precio muchísimo más alto con sueldo más bajos... Pues algunos creen que subirá eternamente... Sin motivos. Simplemente es fé.

El segundo punto es un problema como he dicho antes de mentalidad. Alquilar NO es tirar el dinero (¿lo es también pagar una noche de hotel?). Alquilando y no comprando tengo las siguientes ventajas:
- Al mes tengo 1000 eurines más en el bolsillo, que me sirven para salir de fiesta, viajar muy muy a menudo, tener y mantener un coche, tener hobbies más o menos caros (tipo esquí, surf, vino, fiestas...), vacaciones, inversión, ahorro (palabra poco conocida por aquí).
- No tengo que andar pendiente de si sube el euribor, las reuniones de vecinos, la contribución, las derramas, los impuestos...
- Puedo cambiar de la noche a la mañana de piso, de trabajo, de ciudad, de vida... si me apetece. No estoy atado a un montón de ladrillos.
- No tengo por qué tragar lo que me echen en el trabajo, con una pareja, con la vida... Directamente no tengo deudas con ningún banco. El día que me apetezca me piro de nuevo a Bilbao y vivo un par de años muy holgadamente, buscando tranquilamente curro, estudiando, surfeando...
- No tengo que seguir (como muchos) a la fuerza, viviendo con mis padres, para "ahorrar para una entrada". Gano en autonomía. Nadie tiene por qué decir nada sobre qué hago, cuándo entro en casa, con quién...


El ciclo del mercado inmobiliario lleva ya un tiempo cambiando de fase y entrando en declive. En muchas ciudades los pisos llevan entre seis y doce meses bajando (de momento levemente, pero bajando), lo que pasa es que las estadísticas llegan con retraso. Ahora ya se empieza a oficializar el hostión que nos vamos a pegar en este país. ¿Que no? Tiempo al tiempo...

Aquí os enlazo esta noticia publicada hace unos días y os dejo el video con el programita de TV3 emitido el 18 de marzo: El Fin de la Burbuja Inmobiliaria




TV3-Fi de la bombolla-Fin de la burbuja - More free videos are here


PD: Dedicado a mi amigo del norte (de europa)

¡Viva el vino!

Hecho polvo. Así ando después de un fin de semana dedicado a "la cultura del vino" por tierras riojanas. Pinchos y vinos por la Laurel, visita a la bodega de Roda en Haro (cata incluida), comidita en Labastida, curso de cata en el Museo del Vino de Dinastía Vivanco, cenita por Logroño (más vino), comidita en Agoncillo... El curso de cata es muy recomendable... Dura dos horitas y sólo cuesta 20 eurines... ¡Ya sé lo que significa un "vino estructurado y complejo", jejeje.

Después sólo queda gritar aquello de "¡Viva el vino!", como un español sensato y de bien.